La literatura, como en casi todos los campos que componen este gran sistema de relaciones y hábitos que llamamos cultura y mercado; siempre está abierta a la posibilidad de la producción. Ergo, es arduo
reseñar y comentar a la barbaridad de gente escribiente que cada época regurgita. De ahí que tengo claro la imposibilidad de rescatar todo. Pero también la certeza de lo importante que es hacer nuestro aporte y salvar, en la medida de lo posible, vestigios de ese pasado que se proyecta a nuestros días y nos describe. Porque ese es uno de los grandes valores de la Literatura, creo yo.
La cuestión es que me estoy dedicando a rescatar la obra de autores de Mendoza en particular y rarezas en general. En esta ocasión les traigo una obra de colección absoluta para los críticos y entendidos: El Arte de Amar: el hombre. Una colección de textos aparecidos allá en 1967 y que tiene algunas particularidades y detalles que la hacen un hermoso e histórico producto cultural.
1ro, es una antología de textos escritos exclusivamente por mujeres. Además, todas fueron escritoras con un alto grado de visibilidad por su calidad literaria. Tal vez la menos conocida, para los no menduques like us, sea la inteligentísima, rebelde y confrontativa Iverna Codina, autora por la que yo llegué a esta antología. Pero aquí hay textos de Liliana Heker, Marta Lynch, María Angélica Bosco y Eva Giberti, entre otras. Segunda curiosidad: todos son textos acerca del amor conyugal, seis cuentos y un ensayo que abre la antología y se mueve dentro de la corriente psicoanalítica. Tercera curiosidad: la editorial, que pomposamente anuncia varias colecciones más y otros números de esta; desapareció sin dejar mayores logros que este volumen que parece haber sido creado ad hoc. Los otros libros que pude pesquisar son antologías también pero de textos editados en otros lugares. Es válido conjeturar que El arte de amar haya sido una apuesta que no salió tan bien. Una pena. Aunque, al menos, nos quedó este texto que hoy, en un acto de justicia poética con mi querida y admirada Iverna Codina (y con el resto de zarpadas que aparecen escribiendo en esta antología, aclaro), les comparto para que bajen y distribuyan como un virus cultural que mate esta peste global.
No hay comentarios:
Publicar un comentario